Este colgante hecho a mano es un hermoso ejemplo de artesanía tradicional. La base consiste en media calabaza, de la cual cuelgan hilos de cuentas rojas con semillas rojas de kokrikri de manera elegante. Todo el conjunto forma una decoración colorida y natural que aporta calidez y carácter a cualquier espacio. Gracias al uso exclusivo de materiales naturales y sostenibles, cada colgante es único en forma y acabado. El juego de colores llamativos convierte esta pieza en un punto de atracción que puede utilizarse tanto en interiores como en exteriores.